En el mundo de los juegos de mesa, hay dos tipos principales de aperturas: abiertas y cerradas. Una apertura abierta es aquella en la que todos los jugadores tienen acceso a la misma información y pueden tomar decisiones basadas en ella. Una apertura cerrada, en cambio, es aquella en la que los jugadores tienen información diferente y no pueden tomar decisiones basadas en lo que saben sus oponentes. Entonces, ¿cuál es mejor? Veamos los pros y los contras de cada una.
Los pros y los contras de los diferentes tipos de aperturas en los juegos

Aperturas abiertas
La principal ventaja de una apertura abierta es que nivela el campo de juego. Todos los jugadores tienen la misma información, por lo que nadie tiene ventaja sobre los demás.
Las aperturas también tienden a ser más cortas que las cerradas, porque los jugadores tienen menos necesidad de dedicar tiempo a averiguar lo que sus oponentes están tramando.
Por último, las aperturas suelen dar lugar a partidas más equilibradas, porque los jugadores pueden reaccionar más fácilmente a lo que hacen sus adversarios
El inconveniente de las aperturas es que pueden ser menos emocionantes que las cerradas. Como todos los jugadores tienen la misma información, hay menos espacio para las sorpresas y los juegos mentales. Además, las aperturas pueden dar lugar a un juego menos interesante, ya que es más probable que los jugadores sigan estrategias predecibles
Aperturas cerradas
La principal ventaja de las aperturas cerradas es que pueden dar lugar a un juego más emocionante. Como los jugadores tienen información diferente, pueden sorprender a sus oponentes con jugadas inesperadas.
Las aperturas cerradas también pueden dar lugar a partidas más largas, ya que los jugadores necesitan tiempo para averiguar lo que traman sus oponentes.
Por último, las aperturas cerradas suelen dar lugar a partidas más competitivas, ya que el jugador con más información suele tener ventaja sobre sus oponentes
El inconveniente de las aperturas cerradas es que pueden ser injustas. El jugador con más información suele tener una ventaja significativa sobre sus oponentes.
Además, las aperturas cerradas pueden llevar a tiempos de juego más largos, porque los jugadores necesitan tiempo para averiguar lo que sus oponentes están haciendo. Por último, las aperturas cerradas pueden dar lugar a partidas menos equilibradas, ya que el jugador con más información suele tener ventaja sobre sus oponentes
Conclusión: Entonces, ¿qué tipo de apertura es mejor? La respuesta depende de sus preferencias como jugador. Si prefiere un juego emocionante con muchas sorpresas, entonces podría preferir las aperturas cerradas. Sin embargo, si prefiere tiempos de juego más cortos y una jugabilidad más equilibrada, entonces puede que prefiera las aperturas. En definitiva, ¡depende de usted!